En este post me gustaría hablarte de cómo yo entiendo la belleza natural que todos y todas tenemos y que para mi es la verdadera, la auténtica.

La belleza es un concepto muy abstracto y hay muchas maneras de entenderla. La definición exacta de belleza es la siguiente: cualidad de una persona, animal o cosa capaz de provocar en quien los contempla un placer sensorial, espiritual… Bello es todo aquello que nos seduce y nos que perturba de una forma positiva.

La belleza natural comienza en tu interior, quererse y sentirse bien con una misma o con uno mismo. Nuestro bienestar emocional siempre se va a reflejar en el exterior, en nuestra piel y en nuestra salud. Sentir que eres libre de poder decidir tu manera de sentirte bella, sin imposiciones y sin normas establecidas.

Esta parte es la más importante, ya que sin ella, todo lo que hagamos pierde valor.

Luego viene, por supuesto, todo lo demás y no menos importante, como una buena alimentación, rica y variada, llena de nutrientes, vitaminas y ácidos grasos esenciales tan beneficiosos para nuestra piel.

Beber agua, por lo menos 1 litro y medio es otra manera de hidratar tu piel y de favorecer la salud de tu cuerpo.

Otro requisito importante es cuidar tu piel con productos naturales que respeten tu salud y la del medio ambiente. Es muy saludable en todos los aspectos, buscar momentos de autocuidado para mimarnos y querernos. Sentir que nos cuidamos por dentro y por fuera es muy placentero. Me encanta esos momentos que te dedicas a ti, como prepararte una mascarilla facial con arcillas o un baño con sal para eliminar toxinas o cuando te aplicas tu hidratante facial con un buen masaje.

Ejercicio y Naturaleza

Otra rutina que deberíamos incorporar en nuestra vida es  hacer algo de ejercicio físico, el que te vaya mejor.  Para mi, el yoga es una práctica maravillosa ya que contribuye a un cuidado más holístico. Sus beneficios a nivel físico y emocional son magníficos.

El yoga te ayuda a la oxigenación del cuerpo y a la estimulación de la circulación. Todo esto contribuye a lucir una piel radiante, sana y luminosa.

El contacto con la naturaleza es fundamental. Respirar aire puro, disfrutar de las distintas estaciones y de los tesoros que nos regala, conectar con nuestra esencia y con lo que nos hace sentir vivas y vivos. Todo esto, contribuye enormemente a nuestra salud, es un regalo sensorial.

Y por último, rodearte de gente que te quiera, que te aporte cosas buenas , que te haga sentir bien. Escuchar música, bailar, ir a exposiciones, leer, pintar…. en definitiva, todo aquello que te alimente el alma.